10 noviembre, 2016

Recepción de moldes

Recepción de moldes

A la salida de la línea, la recepción de las motas se realiza mediante un transporte vibrante especialmente diseñado para evitar la adhesión de la arena, mediante el calentamiento de su superficie.


El transporte vibrante puede ser accionado por dos vibradores eléctricos externos, pero en ocasiones, se pueden utilizar transportadores de frecuencia natural , si se requieren largas distancias o ángulos ascendentes de 5º o superiores.
Los transportadores de frecuencia natural están especialmente capacitados para llevar a cabo los trabajos más duros, bajo condiciones extremas tales como abrasión, choque o cargas importantes


Pueden transportarse materiales a muy alta temperatura; para ello se construyen bandejas especiales soportadas al bastidor principal mediante resortes, los cuales absorben las deformaciones de la bandeja sin repercutir las mismas al bastidor principal. Las bandejas pueden ir dotadas de parrillas muy robustas, fondos de recogida así como de compuertas de descarga intermedias. Una de las operaciones clásicas es el empleo para el transporte de piezas al rojo y la separación de la arena de las mismas durante el transporte. También se fabrican instalaciones completamente estancas a atmósfera de polvo.


Estos aparatos de un diseño robusto, proporcionan un servicio libre de problemas, aún bajo las condiciones más adversas, facilitando altas capacidades y funcionamiento libre de mantenimiento.
Su diseño permite transportar piezas de gran tamaño.
Las motas mal nodulizadas pueden ser recuperadas por un extractor vibrante móvil , colocado de forma perpendicular o paralela a la línea.


El movimiento del extractor vibrante puede llevarse a cabo mediante dos moto-reductores o de forma neumática.

En ocasiones, puede instalarse un desmoldeador vibrante para recuperar la arena.